Guarnición bien sencilla y sabrosisima.
1.- Trocear en juliana 10 cebollas (reservar).
2.- Caramelizar en una cazuela dos cucharadas soperas de azucar (el jarabe tiene que estar transparente, pero cuidad con que no se queme).
3.- Sobre el jarabe fundir una cucharada sopera de mantequilla.
4.- Verter las cebollas, empaparlas bien, subir el fuego y añadir unas diez cucharadas soperas de aceite de oliva y una pizca de sal.
5.- Remover con suavidad durante media hora. La cebolla se tiene que poner oscura, pero no quemarse.
6.- Bajar el fuego y dejar que la cebolla se confite durante hora y media.
7.- Añadir ocho cucharadas soperas de granadina y una pizca de sal y dejar a fuego lento la otra media hora final.
El resultado es una maravillosa guarnición para carnes (yo creo que sobre todo cerdo).
Buen provecho.
Comentarios
Hola, descubro por medio de Pablo Aretxabala este nuevo blog del departamento más bloguero del mundo, y parece que estás hecho para esto, menuda explosión de información en dos días ;-]
Tiene tan buena pinta la receta que no sé yo si la reservaría para guarnición en caso de que la hiciera ;-)
Saludos y bienvenido.