Contrapublicidad, adbusting o subvertising visto la semana pasada en las calles de Bilbao.
Para mi, torturador animal y no asesino (solo se puede asesinar a personas).
Pero, sea como fuere, olé, olé y olé por el contrapublicista.
ARTICULOS ANTERIORES EN ESTE BLOG QUE TRATAN DE TEMAS RELACIONADOS Y QUE PUEDE INTERESARTE: