Hace unos días tuve la oportunidad de participar en el undécimo curso de la AVNAU (Agrupación Vasco-Navarra de Arquitectos Urbanistas), dependiente del COAVN. (Colegio Oficial de Arquitectos Vasconavarro).

En esta edición el título del curso ha sido RE-MATANDO EL PLANEAMIENTO.

Yo participé en un panel dedicado a la posible muerte del suelo urbanizable. Y se me pidió que hiciera una ponencia sobre el papel de la banca en la reutilización del tejido urbano edificado en la ciudad de Barcelona.

Utilicé como guión de mi exposición la siguiente presentación:

Mis tres conclusiones (que se sustentan en datos y valoraciones que se repasan someramente a lo largo de toda la presentación) fueron las siguientes:

1.- No habrá mucha vida más allá de la Responsabilidad Social Corporativa de la banca y la vuelta a los “viejos buenos tiempos”, si sobre el suelo urbano, la banca (incluida la SAREB), el crédito, el alquiler y la vivienda vacía no hay reformas legales con fuerte impacto en el BOE.

2.- Salvo que haya cambios severos, mientras los contribuyentes digerimos los restos de la burbuja, el mercado volverá a depredar nuevos tejidos, dejando maltrechos o abandonados los ya mercantilizados, con todas las externalidades que eso supone.

3.- En Barcelona, dentro del mismo marco, hay algo de esperanza, dada la situación física y el equilibrio de fuerzas públicas - privadas - sociales.

• Hay un cierto oligopolio público de suelo y obra nueva.

• Las administraciones pueden usar técnicas como el tanteo (individual y por áreas), la cesión obligatoria de vivienda vacía de los grandes tenedores, convenios cesión de vivienda a largo plazo con banca y fondos, compras de vivienda usada vacía, etc.

• Existen unas fuertes ayudas públicas a la rehabilitación de edificios y viviendas, con enfoque social y ecológico y un esquema de governanza no muy habitual y de gran interés como es OBRA.

• Tímidamente están empezando a aparecer productos financieros para la rehabilitación dirigidos a comunidades de propietarios, que puede complementar las subvenciones públicas y los recursos propios de los propietarios de viviendas y edificios.

• Se tiene la voluntad de aplicar de las reservas de vivienda protegida también en suelo urbano.

• Están emergiendo nuevas formas de gestión de lo urbano, incipientes aún, pero inexistentes en otros lugares que tienen su punto de partida en la reutilización de los tejidos ya existentes: Pla Dintres, Sogeviso, Habitat3, Housing Association, cohousing-masovería urbana, etc.

Me gustaría estar total y absolutamente equivocado en relación a las dos primeras conclusiones ...