En los últimos años desde el Departamento de Vivienda del Gobierno Vasco hemos puesto en pié un asunto que a muchos les parecía simplemente una quimera: más de 4.000 viviendas libres que estaban vacías ahora han sido cedidas por su propietarios (que renuncian a precio a cambio de seguridad en el alquiler; cobran de media 580 euros al mes, bastante menos que el alquiler de mercado en Euskadi, con lo que este programa es deflacionista) están alquiladas a través de BIZIGUNE a precios sociales (280 euros al mes de media) a inquilinos inscritos en Etxebide y, en la Comunidad Autónoma en su conjunto, hemos pasado de tener 25.000 viviendas vacías a estar por debajo de las 18.000.

Hasta el año 2003 la Administración en Euskadi, a pesar de haberlo intentado en repetidas ocasiones, no había movilizado vivienda libre vacía hacia el alquiler social. Nada, cero lepotero. A partir de esa fecha en Euskadi se pasó de las palabras a los hechos, como se puede comprobar en el siguiente gráfico, y en el año 2009 estamos seguro de que BIZIGUNE tendrán a 5.000 familias vivienda en su parque de alquiler público. Desde el punto de vista medioambiental, social y económico un éxito para toda la sociedad vasca. 

Como en los últimos años me habéis pagado el sueldo los contribuyentes por cosas como esta y ahora toca examinarse ante el contribuyente y votante, ahí dejo el dato para que se tenga en cuenta.